La moda de la Selva Negra

6.12.15

El arquitecto de sueños


Acompañado por cientos de soldados de azotea, legionarios venidos de Capadocia, que se arrodillan a sus pies y, en volandas le llevan por laberintos de azulejos en añicos, bordeará los balcones de olas, quebrará despistado la claridad de los tragaluces. Buscará ansioso los destellos irisados del vidrio y acariciará las columnas de las bóvedas habitadas por dragones aguamarina, que juguetean con las hélices, y las cuádricas en las galerías. Antes de iniciar ese paseo de eternidad con el ejército de chimeneas, quedará inerte tras el encontronazo baladí con un tranvía que le dejará roto en las vías, como un trencadís.

Texto ganador en la edición del programa Wonderland de la primera semana de Diciembre de 2015.



4 comentarios:

  1. ¡Enhorabuena, Mei!

    En sueños, uno puede volar y andar al mismo tiempo, y si se lo propone, despierto, igual también.

    Me ha gustado mucho tu micro entre la realidad y el sueño, y la utilización de la palabra trencadís.

    Besos.

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  2. La vida y los sueños son todo uno, todo es vida

    Buen relato

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Seguramente hay oro en tus palabras